jueves, 30 de julio de 2009

25 parpadeos del 30 de Julio que pueden provocar potentes ráfagas en insólitos lugares de Pekín en fecha indeterminada



Uniparentalidad numerosa - Nanim Rekacz
Soñaba con ser despertada por el beso de un príncipe, pero, al abrir los ojos, sus siete hijitos eran los únicos que estaban ahí.

Noche de Brujas - Antonio Cruz
Cegado por el pánico, desenfundó el arma y disparó repetidas veces sobre el monstruo. Nadie le había dicho que esa noche era hallowen.

Móvil Da Vinci - Sergio Gaut vel Hartman
Escribe una microficción en un teléfono móvil. A continuación abre El código da Vinci en la página 87 y lee este mensaje: “¿Vienes a cenar, querido?

Un cambio de rubro - Sergio Gaut vel Hartman
Las princesas de los cuentos, hartas del Príncipe Azul, indujeron a Perrault a dedicarse a la narrativa erótica. Ahora son las felices protagonistas de la novela El burdel de las princesas.

Ramón Gómez de la Serna
Escribir con lápiz es marcar sólo la sombra de las palabras.

Bruno Henríquez
El encapuchado nunca se quitó la capucha. Llevaba tanto tiempo encapuchado que ya no se acordaba de su rostro.

Javier López
Por la noche no encendía las luces. Usaba las cortinas para no dejar pasar la oscuridad.

Javier López
Aprendo cada día lo que no se debe hacer, decir, pensar, desear, sentir. Llegaré a ser sabio, por omisión.

Aceite primigenio - Héctor Ranea
Los olivos milenarios aún dan aceite, aunque quien bebe debe enfrentar sueños con torturas que los habitan que no dejan escapar a los incautos. Se mantiene en secreto de quién son esos olivos.

Ñandú - Héctor Ranea
En el averno, un ñandú que dejé cojo se ocupará de picar en mis ojos los gusanos que crecerán en ellos día tras día.

Advertencia VII - Saurio
La ingestión de esta ráfaga puede resultar perjudicial para su salud. Por favor, escúpala ya mismo.

Rafael Vázquez
Cuando le impuso las manos, el ciego pudo ver, mas con una sutil huella dactilar en todo. Jesús acostumbraba firmar sus milagros.

José Luis Zárate
La muerte visitará algún día a la muerte.

José Luis Zárate
Distrae la vista, que el público no vea lo que hace la otra mano. Houdini escapó de este cuento y sólo dejó atrás la letras de su nombre.

Oriana Pickmann
Tengo buena suerte en el juego. Pero cada vez que apuesto mi corazón, pierdo.

Oriana Pickmann
Tánatos engaña al desesperado entregándole la promesa del sueño eterno.

Santiago Eximeno
Vaya, he olvidado las tijeras, susurró la Parca, y el anciano agonizante maldijo en dos lenguas muertas.

Santiago Eximeno
Ven a mis brazos, decía mi abuela, pero los cerraba antes de que yo llegara, abrazando al otro nieto, ese que nunca tuvo.

Razones inversas – Manuel Pérez Báñez
Si el sueño de la razón produce monstruos, el sueño de los monstruos producirá medias, terceras y cuartas razones.

Al vuelo – Manuel Pérez Bañez
Tal vez los pájaros vuelen para recordarnos que existe el aire.

Anonimato - Olga A. De Linares
El viento, como un cartero diligente, me trae un papel. Con letra despareja alguien pide auxilio. Pero el viento no conoce al remitente, y juntos compartimos una angustia inútil y destemplada.

Solipsismo - Olga A. De Linares
Le dijeron que no podría dejar su huella, que ya todo estaba hecho. Meditó largamente esas palabras. Luego, buscó la trama de la realidad.
Y comenzó a deshacerla.

Carmen María Hernández
La tierra está llena de polvo de estrellas fugaces. Aspira profundo y pide un deseo.

Maniquies – Jacinto Deleble
La escalera de mano, vacía, permanece apoyada sobre el escaparate de la tienda, y la anoréxica desciende los peldaños reflejados.

Recordar – Jacinto Deleble
Nunca imaginó que su propio ectoplasma tuviera tantas cicatrices. Algún otro fantasma le explicó: Nadie escapa ileso a la memoria.