miércoles, 7 de diciembre de 2011

83 ráfagas con seres extraterrestres




Una fonda de mala muerte, en los arrabales de Saturno – Sergio Gaut vel Hartman
—¡Camarera: hay un europeo en mi sopa!

Incorpóreos – Javier López
Los fantasmas de los extraterrestres no lograron asustarnos tanto como ellos mismos. Al menos, no tenían un aspecto tan desagradable.

Preservación – Marcos Zocaro
Luego de debatir sobre la conveniencia de interactuar con la civilización descubierta recientemente en el sistema planetario vecino, sopesando los pros y contras de interactuar con seres tan beligerantes, los extraterrestres decidieron no contactarnos.

Capacidades especiales - Fernando Andrés Puga
—No se deje llevar por las apariencias, amigo mío. Aunque la torpeza de mi andar, la deformidad de mi cara y lo enmarañado de mi dicción digan lo contrario, yo no soy un extraterrestre.
Acto seguido, desapareció ante mis ojos.

Sin acuerdo – Héctor Ranea & Sergio Gaut vel Hartman
—¡Somos los auténticos! —clamaban los de escasa estatura.
—¡Vulgares copias! —contestaban con desprecio los más altos.
Los mukij de Micronomegas se habían clonado para visitar la Tierra, pero cuando inventaron la máquina del tiempo y superaron esa fase primitiva, lograron ser indistinguibles de los terráqueos.

La nave de los locos – Esteban Moscarda 
Los extraterrestres que llegaron a la Tierra fueron un problema: eran los dementes descartados de innumerables mundos, librados al azar del espacio, para que las estrellas los curasen.

La risa, remedio infalible - Alejandro Hugo Gonzalez
—¿De qué hablás? ¿Una invasión extraterrestre? —Carolina me mira burlonamente—. No me hagas reír, querido.
—Sí —le respondo con crueldad, y la hago reír hasta la muerte.
Y así vamos conquistando este planeta.

Capacidad de síntesis en cinco palabras - Javier López
Soy extraterrestre. Me sobran tres.

La solución del problema – Sergio Gaut vel Hartman
Los venisianos se parecían tanto a los pitufos que su invasión a la Tierra terminó siendo conjurada por los abogados de Pierre Culliford (también conocido como Peyo) con una simple demanda por usurpación de identidad.

Verbos - Rafael Vázquez
Disfrazados de palabras, los extraterrestes inducían ideas en el Creador para atravesar millones de años luz de distancia en un solo instante.

Subducción – Guillermo Vidal
Hasta la fecha no hay casos constatados de abducción de personas, pero si es probable que los alíens dejen en nuestro planeta los delincuentes más terribles y feroces de sus propios mundos. Algunos de ellos se superan en maldad entre nosotros y son famosos. Realmente algo de otro mundo.

Soñador – Esteban Moscarda 
Soy extraterrestre: nunca estoy en la Tierra.

Malentendido – Sergio Gaut vel Hartman
El primer Dakar realizado en Marte terminó en catástrofe. Los marcianos descubrieron que la nafta los embriagaba y se dedicaron a sorberla de los tanques de los vehículos. Peor aún, como los marcianos parecían conejos, los terrestres extinguieron la vida en el Planeta Rojo a puro guiso.

Proverbios 15:3 - Héctor Ranea
Tuve que acercármele para mirar al extraterrestre. Tenía ojos en todas partes, pero era, en verdad, ciego.

Los extraterrestres arribaron - Carlos Feinstein
Comieron las vacas, somos el postre.

Otro fracaso - Sergio Gaut vel Hartman
La novena invasión que los marcianos lanzaron sobre la Tierra terminó en un desastre. La llegada de la flota coincidió con la jornada final de Gran Marciano, un reality de humanos que supuestamente se comportaban como habitantes del planeta rojo. Las naves, sin control, chocaron contra el cerro Uritorco.

Sombras - Rafael Vázquez
Cuando nos dimos cuenta nuestro sistema de vida ya era impensable sin ellos. Cómo imaginar que los extraterrestres eran la luz de las estrellas.

Cuando despierten – Esteban Moscarda 
Cuando llegaron los marcianos no lo podíamos creer: eran dinosaurios, venían a recuperar la Tierra y nos mandaban a dormir una siesta de varios siglos. Hay que ver si cuando despertemos siguen ahí.

Exogenitalidad -  Sergio Gaut vel Hartman
Había logrado, finalmente, seducir a la hembra extraterrestre. Ahora sólo restaba deducir, de todos aquellos orificios y protuberancias y hendiduras, cuáles debían ser apretados, penetrados, chupados y/o mordidos, lamidos, estrujados, impregnados, aspirados y/o arrancados, masticados.

Variaciones sobre «La metamorfosis» de Kafka XXVIII - Daniel Frini
—Hijos —dijo la Reina Madre Alien —les presento a Gregorio, un primo que vino de la Tierra.

En un restó de Canopus – Sergio Gaut vel Hartman
—Mesero: este humano está crudo. ¿Podría asarlo un poco más?

Camino – Esteban Moscarda 
Del mono al Hombre y del Hombre al Superhombre hay solo un largo trecho de guerras intergalácticas con seres que aún no han abrazado la divinidad como la hemos alcanzado nosotros.

Por deporte - Sergio Gaut vel Hartman
Los alienígenas abandonaron la Tierra, ignominiosamente derrotados. A pesar de tener seis piernas, el fútbol no era para ellos. El 18 a 0 que el Barcelona FC le propinó a Sirte Unidos, lo dice todo.

Mensaje - Ricardo Bernal
Después de décadas de arduo trabajo, por fin los científicos lograron descifrar el mensaje del alienígena muerto: "BÉSENME LAS PATAS".

Clasificados 5 - Gonzalo Geller
Aniquilación de extraterrestres a domicilio. Satisfacción garantizada.

Camuflados - Sergio Gaut vel Hartman
Los extraterrestres pueden adoptar la forma humana. Toda mi familia está formada por extraterrestres. Mi madre, mi padre, mis hermanos, mi mujer y mis hijos. Todos son extraterrestres disfrazados. El único que no pudo ser copiada fue mi suegra; no hay manera de imitar a un monstruo semejante.

Un caso límite – Javier López
Fue vista por última vez acompañada de extraterrestres. La llevaron directamente al psiquiátrico. Los extraterrestres.

Diagnóstico - Susana Duré
El extraterrestre aguardaba en la camilla, el doctor lo examinaba. Sufría un agudo caso de meteorismo.

Un fracaso marciano que no quedó registrado - Sergio Gaut vel Hartman
El 28 de diciembre de 2028 se produjo la 54º invasión marciana, pero nadie se dio cuenta porque se utilizaron naves invisibles. Eran tan perfectas que tampoco ellos las veían y las destrozaban chocando entre sí.

Clasificados 7 - Gonzalo Geller
Visitante alienígena festeja su cumpleaños. Venir condimentado.

Odisea - Guillermo Vidal
Después treinta años de investigación, ochocientos mil millones de dólares y trescientos noventa muertos, descubren en Titán rastros de una avanzada civilización extraterrestre. Traducen de un gran monumento este mensaje: ¡Que la inocencia les valga, Spielberg!

Cierre definitivo - Claudio Amodeo
Los extraterrestres cerraron el circo. Se llevaron todas las ciudades.

Megalomanía - Carmen Carrillo
El extraterrestre emplumado además de maricón, tenía delirio de grandeza. Lo supimos cuando anunció que dejaría de ser virgen hasta que terminara el quinto sol, al regreso de Quetzalcóatl.

Estupor - Bruno Henríquez
Lo primero que sorprendió al extraterrestre fue descubrir que la Tierra estaba habitada. En segundo lugar que sus habitantes se consideraran inteligentes.

Novela de ciencia ficción condensada – Sergio Gaut vel Hartman
Los extraterrestres conquistaron la Tierra. ¡Un gran aplauso!

La guerra de los Ovnis - Carlos Feinstein
El ataque extraterrestre fue brutal, no usaron ningún rayo, ni armas de partículas. Provocaron que los humanos pudieran leerse el pensamiento entre ellos. La matanza producto del ataque de furia no se hizo esperar.

Buenas razones - Guillermo Vidal
De tanto cavilar los científicos pierden la respuesta más sencilla. No se ha captado vida extraterrestre hasta la fecha, no por estar solos sino porque estamos fuera de cobertura y tanto aquí como en cualquier otra parte de la galaxia a nadie le gusta atender una llamada por cobrar.

En otra parte de la galaxia – Carmen Carrillo & Sergio Gaut vel Hartman
—Las gallinas no tienen tetas porque los gallos no tienen manos —dijo el xenobiólogo.
—No las necesitamos —respondió el extraterrestre emplumado—. Nuestra especie se erotiza picoteando gusanitos.

 Invasión en Marte - Adriana Alarco de Zadra
—¡Vienen los terrícolas!

Crónicas 2 - Gonzalo Geller
Extraterrestres abducen patrullero. Tres muertos, un herido.

Sexo tántrico - Carmen Carrillo
El extraterrestre emplumado, que se excitaba auditivamente, quedó completamente decepcionado cuando, tras un buen rato de picotear juntos gusanitos con su yogui personal, ella terminó sin decir ni pío.

Recato - Sergio Gaut vel Hartman
En los cabarutes y piringundines del planeta Kikiriquí, las coristas se pasean desplumadas, apenas cubiertas por diminutos gusanos donde el pudor obliga
 y por el tiempo que tarda en empezar el picoteo.

Crónicas 4 - Gonzalo Geller
Alienígenas violan un automóvil. Y les gusta.

Caníbales - Adriana Alarco de Zadra
Cuando cayó en medio de una selva tupida, pensó estar en Próxima Centauri. Terminó dentro de una olla. No eran muy diferentes a los terrícolas.

Discapacidad  – Héctor Ranea & Sergio Gaut vel Hartman
El extraterrestre contempló estupefacto al aborigen. Tenía dos ojos en el frente del rostro, exactamente dos más que él pero, en contrapartida, no era capaz de vidurgar, escalopear, hacer prefusión, raspasacar, usar la penetrona, retrover o fijar momentos especiales en el tiempo. Unas criaturas infortunadas, sin lugar a dudas.

Creacionismo – Esteban Moscarda
Un Jedi reza. George Lucas, entonces, lo crea.

Crónicas 1 - Gonzalo Geller
Albañiles invitan con asadito a invasores alienígenas.

Nostalgias - Sergio Gaut vel Hartman
Los extraterrestres de Fungi, el cuarto planeta de Ognoh, se reproducen partogenéticamente, por lo que no tienen parientes. Eso significa que no vienen a invadir la Tierra sino a conseguir un pecho fraterno al que llorar abrazado.

Menú exótico III – Esteban Moscarda
Soylent Green con fibra humana para marcianos vegetarianos.

Imparcial – Guillermo Vidal 
—Usted está equivocado.
—¿Cómo puede estar tan seguro?
—Porqué errar es humano —respondió el alíen.

El guiso – Esteban Moscarda
Este invierno nuclear me está matando. Por suerte, todavía me quedan humanos para un guiso.

2492 – Javier López
Cuando los extraterrestres llegaron para conquistarnos, venían cargados de espejitos de colores y otros fetiches.

Adoquín – Sergio Gaut vel Hartman
El extraterrestre era bastante estúpido.
—Flor —dije mostrándole una camelia.
—¿Comer?
—No, oler. Y esto es un cuadro de Renoir.
—¿Comer?
—No. Contemplar, apreciar. Ah, esta es Josefina, mi suegra.
—¿Comer?
—Sí, por supuesto.

Pasar desapercibido – Javier López
Los extraterrestres ya habitan entre nosotros. "Choca esos cinco", me dijo aquél mientras alargaba su mano, provista de tres dedos.

Modos de decir – Guillermo Vidal
—Tenía la cabeza en los pies y el corazón en la boca.
—La estaría pasando muy mal.
—No, era un nativo de Saturno.

Inconveniente mayúsculo – Sergio Gaut vel Hartman
Los marcianos no han vuelto a invadir la Tierra debido a que los soldados desertan para emplearse en Hollywood y hacer horrendas películas clase “B” sin necesidad de maquillarse.

Atmósfera. Invasión tercera AW - Héctor Ranea
¿Ahora me lo dicen?

Errar es humano – Javier López
Mientras el señor Q'biz paseaba por las verdes praderas de Marte, iba pensando que los humanos y sus instrumentos debían ser daltónicos...

Invasiones marcianas fracasadas. La Dos - Héctor Ranea
La segunda invasión de marcianos llegó en pleno verano boreal. Se achicharraban y los mandaron a refrescarse al Caribe. Los mató el ron.

El último fracaso - Sergio Gaut vel Hartman
Los marcianos decidieron no volver a invadir la Tierra el día que murió Ray Bradbury.
—Si no lo logramos hasta ahora —dijo el jefe de la expedición—, ya no lo lograremos.

OVNIS - Claudio Leonel Siadore Gut
OVNIS: otro fiasco. En vez de llevar el maíz, la carne y el agua que roban a los necesitados, se disponen a formar en cruces sobre el Vaticano y triangulitos arriba del Pentágono.

Cuentos de la batalla de Caseros (la invasión perdida) - Héctor Ranea
Las tropas brasileñas fueron infiltradas por marcianos. Se descubrieron a la primera caipirinha dando el grito de:
—¡Por Marte y Venus a los terráqueos conquistar habremos!
No tomaron prisioneros. Eran guerras duras las de antes.

Todo confuso – Sergio Gaut vel Hartman
Desde que los marcianos y los venusinos libran su eterna guerra en la Tierra, disfrazados de humanos, es imposible saber quién va ganando: ellos tampoco logran distinguirse entre sí y no nos distinguen a nosotros.

Mandado a hacer - Héctor Ranea
Sabios marcianos antiguos (entre ellos Wifwij) habían calculado que la Nube de Oort era de agua y evaluaron la manera de canalizarla a Marte. Lamentablemente, el sistema operativo de los ordenadores de las naves falló y la mandaron a la Tierra.

Tendencias - Sergio Gaut vel Hartman
En Marte no existe la microficción. Un cuento de tres palabras, por ejemplo, es impensable, ya que para decir: “el sol brilla” los marcianos deben escribir “e’é’lly br’yll a’a’áä s’hau ‘loj olig’ô ju’ki ju’ki ol ‘yll pu’to”.

Sopa fatal - Héctor Ranea 
En el Tuyú varios paisanos marcianos, venidos con Superantigroopy, la exitosísima Almirante marciana, murieron al beber la deliciosa sopa de moscas, condimentada con cedrón por Abad Forsuerte, marciano favorito de curas estancieros. Se sospecha de su buena fe.

Vida extraterrestre – Guillermo Vidal
A esta altura de las investigaciones en el espacio ya resulta evidente que la aparición de seres complejos como nosotros es una rareza en el universo y requiere de una combinación muy improbable. Pueden existir especies similares, como es el caso de los terrestres, pero muy inferiores.

Parking - Sergio Gaut vel Hartman
La invasión marciana fracasó porque aterrizaron en el centro de la ciudad capital y dejaron sus naves estacionadas en cualquier parte. Las grúas de la municipalidad las levantaron, ellos se negaron a pagar las multas y se los llevaron presos a todos.

Tras la guerra contra Orión – Javier López
El intercambio de prisioneros tuvo lugar en un agujero de gusano.

Una invasión encriptada - Sergio Gaut vel Hartman
Los marcianos de sangre verde, enemigos de los de sangre amarilla, fueron los protagonistas de las 87ª invasión. Resultó una experiencia terrible, ya que cada marciano ocupó el cuerpo de un terrestre y ni nos dimos cuenta de lo que estaba pasando.

Mis últimas vacaciones en la tierra – Guillermo Vidal
Los alienígenas filmaban como enloquecidos grabando todo lo que se les ponía adelante, iban y venían por el planeta Tierra sin detenerse a tomar aire.
—¿Cómo, no le dijeron?, un meteorito va a destruir la Tierra por completo. No quiero perderme nada. ¿Sabe adónde queda el Obelisco?

Prejuicios – Sergio Gaut vel Hartman
—¿Esto se lame o se mastica? ¿Y esto? Nunca vi algo así. ¿Puedo meter mi largo hasta el fondo? ¿Vas a sacarte todo el traje? ¡Me da asco! Debería estar prohibido que te desnudes.
—¡Maldito seas, N’Kobe! Es la última vez que te acompaño a un prostíbulo alienígena.

Tarde – Javier López
La invasión extraterrestre fracasó. Cuando llegaron, ya no estábamos, y habíamos dejado el planeta inservible.

¡Llegaron los aliens! – Héctor Ranea 
Divertidas anécdotas se contaron entre los asistentes a la recepción de la comitiva de beta Aquarius D3 (Barurio, para sus habitantes) cuando se les dio a probar el alcohol. Fueron recuperados sin bajas en el hospital local. Hay más noticias para este boletín.

Grave error – Sergio Gaut vel Hartman
Fue abducido mientras le daba de comer a las aves en el parque. Los alienígenas, apurados por cumplir con el cupo, interpretaron que las migas, más parecidas a ellos que las otras criaturas, alimentaban al viejo con palomas.

Faltó un detalle – Javier López
Los extraterrestres me trataron bien durante el tiempo que estuve abducido en su nave. Incluso diría que son buenos anfitriones, si no fuera porque no me dieron nada de comer en toda la semana.

Comitiva gubernamental – Héctor Ranea
En nombre de los invasores de Barurio habló traduciendo el Secretario saliente de la ONU. Su mensaje, de hondo contenido, profundo significado histórico, fue traducido a los otros cien idiomas de los países miembros. Dijo: —Estamos re-jodidos.

Tántrico – Sergio Gaut vel Hartman
El extraterrestre emplumado disfrutaba sus clases de sexo tántrico. La excitación crecía sin parar, su cuerpo ardía de placer, el éxtasis lo embargaba. Tardó bastante en advertir que estaba en el horno.

Hurto – Patricia Nasello
Mientras los nuestros discutían vi que un marciano enrollaba el mar y lo escondía en su nave.
—Hey!—grité.
Pero él ya alzaba vuelo.

Anticonceptivos – Héctor Ranea
Las moléculas que funcionan como anticonceptivos han sido usadas en los nuevos ciudadanos de Baruria Nueva (ex Tierra) para insuflarles buen humor, ya que el viaje interestelar los habrían amargado bastante. Las consecuencias sobre la población nativa no se dejará de hacer notar.

La invasión por el éter - Sergio Gaut vel Hartman
Cuando la gente se empezó a suicidar por culpa de los alienígenas, Herbert Wells lo llamó a Orson Welles y le espetó.
—¿Qué hacés, loco? ¿No te das cuenta que este material no es para cualquiera?
—Justamente, por eso, HG, justamente por eso.

El señuelo – Javier López
Durante días asistimos desconcertados a la incursión de miles de pequeñas naves que sistemáticamente eran derribadas por nuestros ejércitos. Eso nos hizo confiar en nuestra superioridad.
Sólo pretendían ensombrecer nuestros radares, mientras la gigantesca nave nodriza se colaba por la puerta de atrás.

Informe final sobre los extraterrestres: todo lo que se sabe fehacientemente, comprobado con absoluta certeza y avalado por pruebas irrebatibles - Sergio Gaut vel Hartman
Nada.
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